Tuéjar: un espectáculo natural y un pueblo lleno de historia
El municipio de Tuéjar reúne muchos lugares que visitar
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Tuéjar, un verdadero tesoro escondido en el corazón de la Comunidad Valenciana. Este municipio, incrustado entre paisajes naturales espectaculares, está repleto de historia y cultura que invita a ser explorada. En cada rincón de Tuéjar, encontrarás testimonios de civilizaciones pasadas y un encanto especial que se respira en sus calles empedradas, sus casas de arquitectura tradicional y sus tradiciones locales.
Imagínate paseando por las históricas calles de Tuéjar, donde cada edificación te cuenta una historia. Aquí, el pasado cobra vida en las robustas torres medievales, en las ancestrales construcciones romanas y en las cautivadoras pinturas rupestres que han resistido el paso de los siglos. Cada uno de estos lugares es un testimonio fascinante del rico pasado histórico que Tuéjar tiene para ofrecer.
Pero no solo es historia lo que hace de Tuéjar un destino imperdible. Su espectacular parque natural te invita a adentrarte en un mundo de serenidad y belleza. Este parque es un refugio para los amantes de la naturaleza y un espectáculo que te dejará sin aliento con su biodiversidad y paisajes impresionantes. Desde senderos a través de bosques verdes hasta impresionantes vistas panorámicas, Tuéjar es el lugar perfecto para conectarte con la naturaleza.
Además, la gastronomía de Tuéjar es una deliciosa mezcla de tradición y sabor que no te puedes perder. Aquí podrás degustar platos típicos de la región, preparados con amor y productos locales. Los restaurantes y bares de Tuéjar son reconocidos por su hospitalidad y su compromiso con la auténtica cocina valenciana.
Ubicado a poco más de una hora de la vibrante ciudad de Valencia, Tuéjar es el destino ideal para una escapada. Tanto si te fascina la historia, disfrutas del contacto con la naturaleza o te encanta la gastronomía, Tuéjar tiene algo para ti.
Te aseguramos que una vez que pises Tuéjar, te enamorarás de su encanto y querrás volver una y otra vez.

Qué ver en Tuéjar y alrededores
Tuéjar limita con los terminos municipales de Alpuente, Aras de los Olmos, Benagéber, Sinarcas y Titaguas.
Su origen se remonta más allá de la época romana, pues las pinturas rupestres que se encuentran en el término municipal y los restos arqueológicos hallados como las cerámicas árabes, monedas romanas y las hachas sílex dan a entender que probablemente las raíces de Tuéjar se remontan a la Edad de Bronce
Fue conquistado por Jaime I a los musulmanes. De hecho villas como Tuéjar, Alpuente o Domeño y sus castillos, tenían bastante importancia en la edad media, porque estaban ubicadas en la confluencia de los reinos cristianos de Castilla y Aragón y el reino moro de València.

Tuéjar
Toda estas vicisitudes pueden observarse en el Castillo, que se localiza al norte del pueblo sobre un pequeño cerro, a una altura de 666 metros sobre el nivel del mar, del que quedan apenas unas ruinas.
No obstante, desde esta cima se observa el pueblo y el valle con unas vistas preciosas.
Muralla
El Recinto amurallado de Tuéjar fue declarado Bien de Interés Cultural en 2005. Se encuentra al pie del cerro donde estaba el castillo. Las murallas se encuentran confundidas entre los edificios del pueblo, incluso en algunos casos forman parte de ellos.
En la actualidad podemos disfrutar aún de dos portales de entrada ‘El Portillo’, restos de una torre musulmana del S.XII y el Portal de los Santos, la puerta principal por la que se accedía a la ciudad medieval de Tuexa, su nombre en la Edad media. Este portal es de los lugares más emblemáticos del pueblo y está situado en el casco antiguo, de intenso sabor medieval, por sus características y por el nombre de las calles que lo forman: Zacuca, Rincón del Mosén, Rajolado, Castillo, Calvario, Horno de Arriba... Además encontramos una Torre Musulmana con un antiguo aljibe dentro y junto a ella, una prensa que se usaba para elaborar vino.
El Pueblo
Las calles del centro histórico nos trasladan a la época medieval, son un exponente de la arquitectura popular, con una trama urbana llena de callejones sin salida o ‘atzucacs’, donde el blanco de las fachadas y el azulete de ventanas y puertas refuerzan la imagen de los pueblos de la Serranía.
No podemos olvidar las fuentes públicas y abrevaderos donde bebían los caballos y animales, como la fuente de la Plaza y la fuente del Niñorro.
La Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles está al norte de la Plaza Mayor y se construyó en el S.XVII, es de estilo barroco con algunas influencias castellanas y uno de los lugares más representativos para rendirle culto a la Virgen. De visita obligada, al igual que las Ermitas.
La Ermita de la Purísima Concepción es muy importante porque está hecha en honor a la Virgen de la Purísima Concepción, que es la patrona del municipio. Data de 1595 y su estilo es particular, no es definido, por lo que resulta muy interesante.

Los Alrededores de Tuéjar
Cascada Becolón
Se sitúa a unos 10 kilómetros del pueblo y es una de las cascadas más bonitas de la Comunitat. La parte de arriba del barranco es abierta, excepto una pequeña garganta que tiene dos pozas que llevan al rappel más alto, de unos 28 metros.
Abajo encontramos uno de los reclamos más destacados de Tuéjar: un puente de roca natural bajo el que se ubica una poza, a la que se accede desde una cascada. Un espectacular paraíso donde poder bañarse en sus aguas refrescantes, o practicar actividades de aventura.
Fuente del Saz
Está cerca del centro, se llega enseguida y es un lugar muy apreciado por los habitantes de Tuéjar por su muy tranquilidad belleza especial.
El río forma varias pozas de aguas poco profundas, unas piscinas naturales, otra zona ideal para refrescarse en verano.
Este espacio es muy frondoso y con abundante agua, otro pequeño paraíso donde disfrutar del entorno natural. Además dispone de paelleros, o zonas de barbacoa, mesas y bancos, así como aparcamiento, para organizar un día completo en familia.
El azud o Mirador la peña del mediodía
Es otra de las joyas de la corona de la zona. Era una antigua presa que fue la acequia mayor del pueblo, está considerada una de las zonas recreativas más bonitas de la Comunidad Valenciana y el nacimiento del río Tuéjar. Contienen una bonita y frondosa vegetación y aguas cristalinas.
El nacimiento del río forma una laguna impresionante que se llama ‘El Pozo de las Escaleras’ y su agua se mantiene a una temperatura constante de 18°C, durante todo el año.
Desde allí, en el mirador se contempla una preciosa panorámica de todo el paraje natural, desde el Puente de Tudela hasta los cortados de la Lácaba.

El Nevero de la Lácaba
En la zona de la Lácaba, a 635 metros de altitud, encontramos este tesoro histórico que forma ya parte de su patrimonio cultural: un antiguo nevero de la época preindustrial restaurado en 2008. Los peques conocerán ‘las neveras’ de la antigüedad.
Estos neveros se usaban hasta la aparición de las fábricas de hielo y las neveras domésticas. Eran construcciones donde se almacenaba nieve y después se extraía en hielo, para usarlo en la época de calor cálidas. Los neveros ya se utilizaban en la era de los romanos, aunque el de la Lácaba fue construido en la Edad Media.
Se construían con potentes muros de contención, necesarios para contener la presión del hielo.
El Molino Marco
Fue construido a principios del siglo XIX y aunque está deteriorado, se pueden apreciar algunos restos como la balsa, el caz o el cubo. A su alrededor siguen en pie otros elementos de tiempos inmemoriales como restos de un puente del antiguo Camino Real del siglo XVIII.
Igual que los neveros en su época, en la sociedad industrial, los molinos eran uno de los elementos más importantes, pues en ellos se hacía la transformación del cereal en harina, que era y es componente fundamental en la dieta mediterránea y de los animales.
Pinturas rupestres de los Corrales de la Silla
Una de las paradas que más les va a gustar a los niños son la pinturas de la prehistoria. Estas pinturas rupestres, que encontraréis subiendo por las aguas del Río de Tuéjar y a quilómetro y medio del pueblo, están en unas pequeñas cuevas y forman parte de un acantilado que tiene 15 metros de altura.

Aves y flora
En el Paraje Natural Municipal Nacimiento del ‘Río Tuéjar’ podemos disfrutar también de la microreserva de flora ‘Riberas del rio Tuéjar’, varias hectáreas de espacio protegido con especies tan variadas como sauces, chopos, fresnos, sabinas, o álamos, que albergan especies protegidas de aves como el águila real , águila perdicera o el búho real.
De hecho, está incluido en la Zona de Especial de Protección para las Aves (ZEPA), espacio protegido Red Natura 2000, la red europea de lugares protegidos.
Por ello es un lugar ideal para el birdwatching o avistamiento de aves. Grandes y pequeños alucinarán con el búho real, las aves carroñeras como el alimoche , la chova piquirroja, el avión roquero, el gavilán, el mirlo, ruiseñor. Incluso alguna águila real y águila perdicera.
¡Y el más buscado! El buitre leonado, que tras su casi total desaparición de la provincia de Valencia en los 70, Tuéjar acoge el único anidamiento natural de toda la provincia y viven allí 20 parejas.
Aventuras
Si lo que os apetece es vivir aventuras y un poco de adrenalina… En Tuéjar se ubican empresas especializadas en actividades de aventura. Desde senderismo, combinado con una degustación de quesos y vino, a escalada, barranquismo y espeleología. Bajar por cañones, cascadas, subir y bajar paredes verticales…, adentrarse en cavidades o ríos subterráneos… ¿Eres intrépido?
Más en la web de Tuéjar.
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Tuéjar cómo llegar:
La carretera V-35, que conecta Valencia con Ademuz, y el enlace V-390.