PsicologiaSalud

Las rabietas, el talón de Aquiles de los padres

Os damos algunas claves para gestionar las rabietas de forma efectiva

Muchas veces los padres no saben cómo actuar ante las rabietas de sus hijos y estas acaban convirtiéndose en su talón de Aquiles. Elena Notario psicóloga perinatal infantil y de adolescencia nos cuenta detalladamente qué son las rabietas y cuáles son las claves para gestionarlas de forma efectiva.
Una de las preguntas más formuladas en consulta es: mi hijo tiene muchas rabietas ¿debo preocuparme?

Las rabietas se consideran una parte normal y necesaria del desarrollo infantil. Son la forma que tienen nuestros pequeños de mostrar su frustración ya que todavía no pueden expresar bien lo que les sucede por falta de recursos para gestionar sus emociones y de habilidades lingüísticas. Suelen aparecer desde el primer año haciéndose más notable entre el segundo y el tercero. Pueden persistir hasta que el niño cumple los cuatro años. Hay que tener en cuenta que las rabietas pueden surgir por varios motivos:

  • Cansancio
  • Dolor
  • Hambre
  • Incomodidad
  • Deseo no cumplido

La pregunta que formulan los padres a continuación es: ¿qué puedo hacer?

Las rabietas se manejan de manera diferente en función de cuál sea el motivo. Si es una llamada de atención lo mejor será ignorar la rabieta y si es por sueño o hambre bastará con cubrir sus necesidades. Muchas veces nos intentan transmitir que quieren hacer las cosas ellos solos. A continuación os damos unas pautas de actuación para gestionarlas de manera adecuada:

  • Es fundamental que los padres os mostréis calmados ya que es lo que intentamos que recupere la calma.
  • Refuerza positivamente cuando tenga un buen comportamiento y pida las cosas con tranquilidad.
  • Ofrece responsabilidades adecuadas a su edad para reforzar su autonomía y autoestima.
  • Ofrécele una alternativa a lo que no puede hacer.
  • Guarda las cosas que no vayamos a darle fuera de su alcance.
  • Empatiza con su estado de ánimo mostrándole que entendemos que esté enfadado.
  • Espera a que se tranquilice para hablar con él.
  • Cuando le hables hazlo a su altura.
  • No cedas a sus peticiones después de la rabieta.
  • Cuando se haya tranquilizado abrázalo.
  • Establece rutinas puesto que son necesarias para proporcionar tranquilidad y control a los niños.
  • Si se muestra agresivo habrá que sujetarlo hasta que se calme. Y proporcionar un espacio donde no pueda hacerse daño.

Las rabietas varían en frecuencia e intensidad Si vosotros los padres perdéis el control con vuestros hijos a menudo durante las rabietas termináis cediendo siempre o veis que se autolesionan es importante que acudáis a consulta de un especialista.

Las rabietas tienden a disminuir a medida que el niño va madurando. No hay que evitarlas hay que entenderlas.

Elena Notario psicóloga perinatal infantil y de adolescencia

Si necesitas orientación o ayuda para tu caso personal puedes contactar directamente con Elena Notario a través de su Instagram o de su página de Facebook. También puedes acudir a una consulta en la Clínica HLA N.Señora del Rosario (Albacete).

NULL

Botón volver arriba

Bloqueador de anuncios detectado

Por favor, considere ayudarnos desactivando su bloqueador de anuncios