Consejos para que los niños duerman bien
Cuánto deben dormir según su edad y cómo conseguirlo
Seguramente has oído muchas veces que el descanso es fundamental para los niños y que la falta de sueño infantil puede acarrear muchos problemas pero ¿sabes por qué? ¿qué hacer para conseguir que duerman mejor? ¿cuántas horas deben dormir realmente según su edad? En este artículo te contamos todo sobre el sueño infantil y sobre todo te damos consejos prácticos para conseguir que los niños duerman bien.
¿Por qué es importante el sueño para los niños y adolescentes?
El sueño infantil tiene una función reguladora y reparadora no solo del cuerpo sino también del cerebro. Diversos estudios relacionan la falta de sueño en niños con bajo rendimiento escolar trastornos de hiperactividad y malos comportamientos.
- Un correcto descanso propicia que los niños enfermen menos. Esto sucede porque el sistema inmunológico trabaja mientras duermen por lo que un descanso insuficiente o de poca calidad puede hacer a los niños más propensos a infecciones o virus.
- Un correcto descanso mejora la memoria. Cuando no dormimos lo suficiente perdemos una parte importante del sueño REM y esta fase del sueño es fundamental para que se pueda grabar en la memoria todo lo aprendido durante el día.
- Los niños que descansan bien están más predispuestos a aprender cosas nuevas. Este aspecto está muy relacionado con el anterior ya que cuando el cerebro almacena y asimila lo que ha aprendido está en mejor predisposición de poder aprender cosas nuevas.
- Cuando estamos cansados estamos más irritables y tenemos menos energía. Exactamente lo mismo les sucede a los niños cuando no duermen lo que necesitan presentan más trastornos de conducta cansancio y falta de creatividad.
- La falta de sueño se acumula por lo que una hora menos de sueño cada día equivale a una noche entera sin dormir al final de la semana. Por esta razón los hábitos saludables de descanso son tan importantes en los niños y adolescentes.
¿Cuántas horas necesitan dormir los niños?
Si tomamos en cuenta las recomendaciones de la American Academy of Sleep Medicine AASM (La Academia Estadounidense de la Medicina del Sueño) estas son las horas de sueño que necesitan los niños según su edad:
- Bebés (de 4 a 12 meses): necesitan entre 12 y 16 horas de sueño incluyendo las siestas.
- Niños de entre 1 y 2 años: necesitan entre 11 y 14 horas de sueño incluyendo siestas.
- Niños en edad preescolar de 3 a 5 años: necesitan entre 10 y 13 horas de sueño incluyendo siestas.
- Niños de primaria de entre 6 y 12 años: necesitan entre 9 y 12 horas de sueño.
- Adolescentes de entre 13 y 18 años: necesitan entre 8 y 10 horas de sueño.
Por supuesto se trata de cifras estimadas pero aunque puede haber pequeñas diferencias es donde se sitúan los estándares de los expertos por lo que si nuestros hijos duermen mucho más o mucho menos de lo recogido en esta tabla deberíamos pensar que puede existir algún problema y no estaría de más consultar con un especialista.
Consejos para que nuestros hijos duerman bien
Cuando se trata de sueño infantil no solo tenemos que hablar de cantidad es decir de número de horas de sueño sino también de calidad. Y esto es tab importante en un niño en edad preescolar como en un adolescente ya que cada etapa tiene sus necesidades pero la falta de sueño tiene consecuencias igualmente negativas para todos.
De hecho son muchos los expertos que están alertando de que la falta de sueño en adolescentes va en aumento y de lo importante que es el compromiso respecto a este tema tanto de ellos mismos como de las familias.
Pero ¿cómo podemos ayudar a que nuestros hijos duerman mejor? Aquí van algunos de los consejos que nos brindan los que más saben de sueño infantil:
- Dispositivos electrónicos apagados desde una hora antes de irse a dormir. Y este consejo es válido para niños o adolescentes de cualquier edad y por supuesto también para adultos. No solo es porque las pantallas provocan excitación también emiten un brillo conocido como luz azul que inhibe la producción de melatonina. Esto es sumamente importante porque envía a nuestro organismo la sensación incorrecta es que no es está cansado.
- Establece rutinas. Esto es especialmente importante en niños más pequeños establecer rutinas puede ser de gran ayuda cuando se trata de conseguir que adquieran buenos hábitos de sueño.
- Cuida los aspectos prácticos del sueño: el colchón la ropa de cama la ventilación y la iluminación los ruidos A veces pasamos por alto estos aspectos pero son muy importantes cuando se trata de asegurar un buen sueño para nuestros hijos.
- Es recomendable evitar alimentos azucarados cafeína o refrescos cercanos a la hora de dormir. Esto es especialmente importante en adolescentes que comienzan a tener su propio ritmo de alimentación.
- Dar buen ejemplo como en casi todo es fundamental. Si nosotros mismos vemos la tele o el móvil hasta tarde y no tenemos buenos hábitos de sueño nos será mucho más difícil inculcarlos a nuestros hijos. Empecemos por dar ejemplo.
- Asegurar una correcta actividad física. Los niños tienen necesidad de movimiento físico y una agenda de actividades demasiado sedentaria puede influir negativamente en un correcto descanso. Jugar en el parque para los más pequeños o practicar un deporte para los más mayores pero la actividad física es fundamental para liberar tensiones y conseguir un buen descanso.
- Ayúdalos a relajarse y apartar las preocupaciones antes de dormir. Un niño que se acuesta pensando en el examen que no ha hecho bien en los deberes que tiene pendientes o en la discusión que ha tenido con su mejor amigo no conseguirá dormir del todo bien. Una meditación guiada música suave relajante o una buena conversación pueden ayudar a que aparten pensamientos perturbadores y puedan descansar adecuadamente.